Descubriendo Zaragoza | Semáforos inteligentes

¡Buenos días lectores y bienvenidos una vez más al blog!

Hoy vengo a traeros dos maravillas de la era moderna, aunque realmente ya lleven entre nosotros varios años, me refiero al "bluetooth" y a los "detectores de campo magnético". Y hoy nos centraremos en una de sus utilidades al servicio de la gente, los "semáforos inteligentes".

¿Alguna vez yendo por la calle se han percatado de cómo los semáforos emiten pitidos al pasar una persona invidente, o como varían sus ciclos de rojo/verde? Puede parecer cosa de magia o un desbarajuste del sistema, sin embargo nada más lejos de la realidad, ya que en el propio semáforo e incluso debajo del suelo podemos encontrar varias piezas tecnológicas que detectan el paso de personas y coches, regulando así los tiempos de paso y alto y a su vez ayudando a las personas invidentes a cruzar la calle con estridentes sonidos.

Semáforo con altavoces para invidentes

En la página web tecnocarreteras.es se nos explica con bastante claridad el sistema electrónico que hay detrás de este misterio, sin duda muy útil, y aquí en este mismo blog lo explicamos igualmente bien. Cada semáforo inteligente cuenta, a su vez, con dos sistemas de detección, en el propio semáforo encontraremos un receptor bluetooth que detecta los ordenadores de a bordo de cada coche que posea esta tecnología y a su vez una pequeña cámara que suponemos también hará un recuento para que la exactitud sea máxima. (No es nada del otro mundo, ya que si se fijan detectarán enseguida que en algunos semáforos hay instalada una pequeña cámara).


Cámara instalada en un semáforo

A todo esto debemos sumarle un sistema un poco más sofisticado, pero este no se encuentra a la vista, sino bajo nuestros pies. En el asfalto encontramos varios sensores denominados "Aforadores de magnetismo terrestre" los cuales, e igual que sus compañeros, detectan el tránsito de vehículos por medio del impacto magnético que estos registran al pasar un automóvil.

De todo esto, la ciudad de Zaragoza llega a contar con al menos: 150 receptores bluetooth, 700 aforadores magnéticos, 160 cámaras y unos cuantos elementos más que ayudan a registrar todo este tráfico de datos como 70 Km de fibra óptica, 40 nodos de comunicación y 19 paneles informativos.

Este sistema está pensado para dos fines: proporcionar información al instante del tráfico en la ciudad y su vez autorregularlo mediante autoajustes que realizan los semáforos. Es curioso cómo creemos que el tema de las ciudades domóticas todavía está lejos y sin embargo ya está entre nosotros, conviviendo oculto en nuestra ciudad y ayudando al transcurso de nuestro día, ¿no les parece todo esto una maravilla de la era moderna?

Muchas gracias por leer esta entrada y espero que les haya gustado, además de que les haya sido de utilidad, pues a partir de ahora sabrán qué se esconde a sus pies y encima suyo.




Comentarios

Lo mejor del último mes

Crecida del río Ebro